Hay básicamente dos conceptos del amor:
Un primer concepto es el amor como
sentimiento. Representa una visión más
profunda y comprometida del querer. Es
común que en un proceso de enamoramiento describamos dos fases complementarias,
primero queremos mucho, y cuando este querer se desarrolla decimos te amo. Entonces amor como una forma superior del
querer, y como sentimiento emparentado a otros como el apego, la posesión y su complemento los celos. “Eres mía, eres mío”. Incluso medimos el amor en los celos, si
siento muchos celos es porque realmente amo.
Pero esta forma de sentimiento no es el único concepto que expresamos al
hablar de amor.
Existe también un concepto del amor diferente
y superior, es el Amor como una actitud frente a la vida, una actitud de afirmación y crecimiento de todo lo que existe, por
tanto una actitud universal y totalizadora.
Por supuesto implica el afecto profundo, implica el desapego, la no posesión
de nada, solo la afirmación, el crecimiento y desarrollo de todo lo que nos
rodea (personas, seres en general, naturaleza)
Este concepto de Amor con mayúscula es la
energía básica del Universo y del desarrollo universal, que se expresa en cada
uno de nosotros a través de dicha actitud de afirmación y crecimiento.
Cualquier actitud de negación o inacción bloquean
a dicha energía universal, sumiéndonos en el dolor, la desesperanza y el
aislamiento.
Sin duda, dos visiones del amor diferentes y
en muchos sentidos opuestas, pero básicamente complementarias. La experiencia del amor sentimiento es básica
para la aproximación hacia el Amor universal.
En este sentido, una experiencia concreta, el
amor a los hijos, muestra justamente esto, opuesto y complementario en cada
momento y en su desarrollo. Sin duda un sentimiento de amor pero que va
necesitando del desapego progresivo para el crecimiento y la afirmación de los
hijos a través de su propia experiencia que desarrollarán óptimamente con un
profundo afecto que necesita estar, pero
cada vez más con una menor intervención concreta; implica el dejar ir, el dejar
ser, el dejar hacer.
Como síntesis el Amor universal en cinco A. Amor
como Actitud, mediante la Atención, el Afecto y la Acción.
Alvaro Píriz Barreiro.
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